¿La última?.

Hacer cola.

Lo de hacer cola es, definitivamente, algo humano.
No es una de esas adaptaciones hechas a partir de observar la naturaleza.

Quizás a un nivel subatómico podemos encontrar cadenas de partículas, filas de átomos, o mierdas de esas, fácilmente comparables con las colas que hacemos nosotros, aunque con una motivación, finalidad y orden que poco o nada tiene que ver con las nuestras.

Las nuestras están formadas por individuos que esperan avanzar hasta la cabeza de la fila para conseguir algo o acceder a algún lugar que desde el final de la fila es inaccesible.
Mientras que las que encontramos en la naturaleza parecen cadenas formadas por individuos que no pretenden nada más que formar parte de esa cadena con el fin o propósito común de justificar su existencia...yo que sé.

Si bien es cierto que estos otros individuos, o lo que sean, tienen la capacidad de ser útiles en otras cadenas cuando cambian y nosotros mientras más veces cambiamos de cola más inútiles parecemos somos.

La cola, entonces y por fuerza, va en contra de la misma naturaleza, es una aberración y nosotros unos aberrantes.

Nadie imagina, a no ser que se lo proponga en serio, que en un charco, en la sabana africana por ejemplo, se forme una cola para beber agua y que los leones, solo por el hecho de llegar tarde, tengan que hacer cola. No jodas!. Los leones beben agua cuando les sale de los cojones, que para algo son los reyes de la selva. (Si, ya sé que selva y sabana africana no son lo mismo, pero esto es un puto Blog de un semi analfabeto y no la web del National Geographic).

A primera vista podría parecer que el mejor sistema para beber agua en el charco es el nuestro, el humano, el de esperar turno, más no es cierto, es un timo, una estafa, un espejismo y una utopía, todo junto.

Sea donde sea que encontremos una cola, encontraremos también a los reyes de la selva(o lo que sea) que se la saltarán sin más, porque pueden y les dejamos hacerlo.
Ya sea en un aeropuerto, con su Bussines Class, o en un supermercado, con sus cajas rápidas para menos de 10 productos.

Lo de hacer cola ha de venir de lejos, porque parece que lo llevamos incorporado en el ADN, impreso en el código genético, en un código de barras o escrito en código máquina o unos cuantos comandos de Basic, yo no lo sé, pero fue posterior a los monos, estos no hacen cola, se cagan en las manos y lanzan mierda, eso si, pero colas no hacen.

Ante dos restaurantes de igual categoría, siempre elegiremos el que tiene una cola en la entrada, eso es así.
Si en el súper hay 6 cajas abiertas, nos pondremos en la que tiene más cola por alguna extraña razón, siendo la más probable que mentalmente hemos contado lo que cada comprador lleva en su carro y creemos que avanzará rápidamente, al estilo RainMan contando palillos.

Quizá simplemente sea porque nos sentimos más protegidos perteneciendo a una manada, ¿no?.

Cuando entramos en una carnicería, da igual cuantas personas estén allí dentro, preguntamos en voz alta "¿quién es la última?"(siempre en femenino, que esa es otra) para ponernos inmediatamente detrás de la primera persona que levanta un dedo.(movimiento normalmente acompañado de un "servidora").

Pero aún hay colas más sospechosas que la de la carnicería o los restaurantes; La cola para embarcar.
Si, las colas que se forman delante de cualquier puerta de embarque en los aeropuertos son realmente sospechosas.
Da igual que falten 5 minutos o dos horas para embarcar.
No importa si todo el mundo tiene asignado un asiento en su tarjeta de embarque.
Incluso si ni tan siquiera es tu vuelo parece tener importancia, te pones en esa cola porque en tu puerta de embarque no hay nadie y no vaya a ser que...

Lo mismo pasa en el cine y aunque sea lo mismo, lo cuento para rellenar esta entrada del Blog.
Faltan dos horas para la película...haces cola.
Tienes el ticket con asiento numerado...cola.
Tienes ganas de mear pero, no vas a dejar la cola.
Te gustaría echar un cigarro antes de entrar, pero no le darás esa satisfacción al tipo asqueroso, a ese bobo hijodeputa que te precede y se muere de ganas de colarse.
No querías ir al cine, no te gusta el cine, pero ahí estás, haciendo cola porque el puto ADN te empuja a hacerla.

Yo no imagino al hombre de las cavernas haciendo cola cada vez que quería entrar en una puta cueva, ni haciéndola para poder zumbarse a la piojosa meretriz troglodítica.
"Perdón, ¿la última para apedrear al mamut?"...no lo veo, ciertamente.

Esto, casi por fuerza, o por lógica, o por la fuerza de la lógica, ha de ser más moderno, seguramente de la edad media, parece que todas las torturas las inventaron los putos medievales, o casi todas.
Es probable que los mercaderes hiciesen cola a las puertas de los castillos para entrar y para salir, vamos, o hacían cola o se iban al foso.
Harían cola para acceder al lupanar de la zona, no se si además pedían turno o sacaban su papelito con un número y esperaban a que, en alguna de las tablillas que estaban sobre las camas de las cortesanas de afecto razonable, apareciese su turno.
Ojo, y no creo que lo de hacer cola en los prostíbulos fuese por falta de putas, nunca hemos andado escasos de furcias, pero en cuanto puedes elegir pues vas corriendo a ponerte en la que tiene cola. (a ver, no en la puta que tiene cola de....rabo, o si, no se, vosotros mismos).

Hacer cola no mola, eso es una ley inamovible de esas del universo, o debería serlo.
Y como hacer cola no mola (si, me ha gustado) hay quienes se ganan la vida haciendo cola por nosotros, seguramente aun podrás encontrar a un jubilado conocido que te pueda hacer el favor, pero tal y como se están poniendo el tema de la jubilación, dentro de poco no tendremos suficientes jubilados para todo. O los ponemos a vigilar las obras o a hacer cola, pero para las dos cosas no nos darán los 4 jubiletas que tendremos en el futuro.

Vamos, que la de colero es una profesión con mucho futuro, yo de vosotros me intentaría sacar el título de colero, porque aunque todos sabemos hacer cola, si el tema diese dinero, alguien nos pondrá un peaje...al tiempo!.